Hoy 24 de Diciembre, Nochebuena, quiero contar una historia a modo de regalo para que entendáis un poco mejor a la persona, al artista que realiza estas maravillosas piezas de tiza.
Sebastián me contó que esta escultura que veis en la foto y que se llama Maternidad estaba en su estudio, y de casualidad entró una pareja mayor y ella se quedó desde el principio atrapada por la figura, entonces él tratándola de guiar y de saber si aquella pieza se convertiría en un regalo para su propia hija (por la edad del matrimonio era algo viable) ella le contestó que no, que nunca habían podido tener hijos, pero que era la primera vez que ella se veía reflejada en una obra como “mamá”.
Cuando me lo contó Sebastián por primera vez se me puso la piel de gallina, y quería elegir un momento especial para una historia tan hermosa. Hoy es el día.
La foto que aquí veis, es la única que hay de esa Maternidad, que ahora estará en algún lugar de la ciudad de Montevideo.